miércoles, 16 de diciembre de 2009

Olas


Es inmenso, es increíble parecen que son miles. Lo son. Son miles. Pero a vos sólo te tocan algunas. Puedes intentar contarlas. ¡No lo hagas!

Algunas tan solo mojan tus pies.

Otras te comienzan a tocar, y te hacen sentir cosas sutiles, te hacen creer.

En ocasiones piensas que no harán nada, y te hacen llorar de lo impresionante de su poder.

Te preparas, les entregas todas las ganas y nada más se esconden antes de llegar.

Algunas te impresionan de lejos, las esperas y son vacías.

Otras están en el momento justo, las disfrutas, y tienes que entender que se fueron.

Parece que viene hacia vos y de repente moja a otro.

Piensas que la ola disfrutará con vos y la desilusionas.

Te agachas para esperarla debajo del mar, y te das cuenta que quieres estar ahí sin que te vea.

La persigues no quieres dejarla ir, pero su independencia no acepta tu caída.

Luego el mar se calma, ves a todos lados y no hay ninguna, sientes que no valió la pena el esfuerzo con las anteriores, y te quieres ir. Pero justo en ese momento te das cuenta que una vez más no es mala idea.

Son miles, pero aún así ¿te sientes más solo que nunca?

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